6 de marzo de 2011

Homenaje a Virginia Satir (1)

(DEDICADO A JOSE LUIS AMPUDIA QUIEN NOS "PRESENTÓ" A ESTA MUJER)

habiéndome hecho una pequeña avería en (el dedo) corazón 
qu me va a impedir teclear con la (mano) izquierda durante un par de semanas,
saco del fondo de armario este escrito de hace... ... 3-4 años.

espero que os guste 


Si la soledad te enferma el alma
Si el invierno, llega a tu ventana
No te abandones a la calma
Con la herida abierta

Mejor olvidas
y comienzas una vida nueva

Y respira el aire puro
sigue el vicio de las dudas …

Sé feliz
(Bolero cantado por Anais Abreu)
http://www.youtube.com/watch?v=u5wY2Vc8ZqA&feature=related


EL INICIO DEL CAMINO, ¿DÓNDE ESTAS?
(los 4 puntos de partida)

Existen cuatro tipos de comunicación que siempre manifiestan las personas
 que tienen una pobre opinión de sí mismas, quienes aún no han aprendido
a vivir de manera autodependiente, quienes aún no han aprendido a vivir sus
5 libertades. ¿Cuál es el tuyo:

Complacer a la gente para que por lo menos te permita vivir y te acepte?

Forzar a la gente a que te obedezca para sentirte seguro,
al menos por el momento?

Mostrar una coraza anti-sentimientos y
sólo mostrar tu lado más razonable (lo que se espera)?

Adoptar una actitud superficial y evasiva ante lo que te ocurre,
ocurre a los tuyos y ocurre a tu alrededor?

Estos tipos de comunicación limitan nuestra propia vida y
 la capacidad de construir con otras personas,
frustran los sueños que uno tiene para sí mismo
e incrementan la cantidad de miedo y dependencia.

Así que, ánimo y haz las maletas que nos vamos de viaje¡


hacia dónde? 

hacia LAS 5 LIBERTADES, … PARA QUÉ?


Para concederme el permiso de

ser quien soy y no quien “debería ser”
ni lo que otros (jefe, pareja, hijos, amigos) esperan que sea (aunque no les
guste y se enfaden). Concederme a mí mismo el permiso de estar donde
crea que debo estar y no donde “debería estar” u otros esperan que esté.

Para concederme el permiso de

sentir lo que siento en vez de sentir lo que
 “debería sentir” u otros sentirían en mi lugar. Trata de comunicar con
transparencia todos mis sentimientos, tanto positivos como negativos,
sin miedo a que la otra persona se enfade, no los acepte o no le guste.

Para concederme el permiso de
pensar lo que yo pienso,
no lo que se espera que piense, y también el derecho a decirlo, si quiero,
o de callármelo, si así me conviene. No tener miedo a dar mi opinión
aunque no coincida con la del resto.

Para concederme el permiso de
correr los riesgos que yo decida correr, en vez de elegir lo que es “seguro”
y no arriesgarme, con la única condición (casi nada¡) de aceptar pagar yo
mismo el precio de esos riesgos, de asumir las consecuencias con plena
responsabilidad.

Para concederme el permiso de
pedir lo que merezco o buscar lo que creo que necesito en el mundo en lugar
de que esperar a que otro me lo ofrezca o de permiso para obtenerlo.

¿cómo se va...?...

en homenaje a Virginia Satir (2)


No hay comentarios:

Publicar un comentario

!Me encantaría saber qué piensas de esto¡